jueves, agosto 17, 2006

Miss Mundo 1967: Madeleine Hartog Bell

Nació en Camaná, Arequipa. Después de ser la semifinalista de Miss Universe en 1967, ella fue la ganadora de Miss Mundo en Londres, Reingo Unido después en el mismo año. Madeleine ahora reside en Florida, actualmente casa y con una sóla hija.
FOTOS:









domingo, agosto 13, 2006

Miss Universo 1957 - Gladys Zender

Fuente: Revista Caretas

Gladys Zender
Reina Eterna

La belleza de Gladys Zender trasciende el tiempo. Hace 46 años, en 1957, fue elegida Miss Universo. CARETAS le dedicó su primera carátula a colores.

ESE año, Gladys ya había aparecido tres veces en la portada -blanco y negro- de CARETAS. La revista se había dedicado a registrar sus encantos y le aseguraba, los motivos saltan a la vista, el triunfo en un certamen tan importante como era el de Miss Universo. Ella, como todos esperaban, fue coronada reina en Long Beach dejando en la pasarela a otras 74 representantes de la belleza mundial. El suceso no sólo provocó un alboroto de magnitudes sorprendentes entre sus compatriotas, sino la primera carátula a colores de esta casa editora, la primera a colores, por cierto, en la historia de las revistas peruanas.

El tiempo ha pasado y Gladys Zender conserva intacta esa serena y majestuosa distinción que dejó boquiabierto al mundo entero. "Voy a cumplir -dice ella- 38 años de feliz matrimonio con Antonio (Meier), y mis cuatro hijos, todos casados, me han alegrado la vida dándome 10 nietos". Gladys, aficionada desde siempre a las manualidades, se dedica ahora a la pintura en muebles de madera y al tejido. "El trabajo artesanal lo he combinado con los deportes y con presentaciones benéficas en el extranjero".

Gladys Zender, la única mujer peruana considerada como la más hermosa del universo, no recurrió jamás a ningún artificio para ser más bonita. Era otra época, es cierto, pero a juzgar por las fotografías, no los necesitaba.

Grácil y bella Gladys Zender, el 6 de junio de 1957. Der.: GLAMOUR A COLOR.- Gladys Zender marcó toda una década con su belleza. Luego de su triunfo en Long Beach, inauguró el primer y único vuelo directo de Nueva York a Talara; después, un Faucett la transportó hasta Lima dónde fue recibida por multitudes. Abajo, en la actualidad, siempre radiante.

FOTOS:










1957 - Gladys Zender Urbina, una bella limeña de tan sólo 17 años, obtiene el título de Miss Perú 1957, y viaja a Long Beach, California - E.E.U.U., donde para sorpresa del mundo se convierte en la primera latinoamericana en coronarse Miss Universo, aquella hazaña ninguna otra peruana la ha repetido. (http://expomissperu.com/html/modules/emp_historia/honor/#)

Miss Peru 1952 - Ada Gabriela Bueno

Fuente: Revista Caretas

Un Grato Reencuentro
Ada Gabriela Bueno, la primera Miss Perú volvió al país. CARETAS patrocinó su candidatura.

En Sacsahuamán, a pocos días de ser elegida. En su nueva visita volvió a visitar el Cusco.

ADA Gabriela Bueno ha vuelto al país. Para las nuevas generaciones su nombre, tal vez, no les suscite nada. Pero para los antiguos limeños, y especialmente CARETAS, ella siempre será motivo de un dulce recuerdo. Es que Doris Gibson, fundadora de nuestra revista, tuvo mucho que ver en su triunfo como Miss Perú en 1952, año en que se eligió por primera vez a una belleza peruana para que compitiera en el entonces afamado concurso Miss Universo. Su elección fue, además, motivo para que apareciera CARETAS como quincenario.
Ada Gabriela recuerda que Doris Gibson la conoció en la primera presentación de las candidatas. "Doris me vio, me tendió la mano, y desde ahí nunca más nos separamos".

Después de larga ausencia retornó a la patria. Seguido, carátula que celebra su elección.

Tenía entonces 18 años y estudiaba ciencias en San Marcos. Y como era natural de Apurímac se presentó luciendo un traje típico, que arrebató a la concu-rrencia. Luego de las emocionantes jornadas en Long Beach, Ada Gabriela ingresó a una universidad de California para seguir los estudios que había iniciado en San Marcos. Pero dos años y medio después dejaba aquella carrera para estudiar arquitectura en la Universidad de Berkeley, donde se gradúa en 1960.
Recuerdo que en uno de sus retornos, en setiembre de 1956, la entrevisté en su casa de Miraflores, donde al compás de sus recuerdos evocó un mensaje que le enviaron sus condiscípulos el día que salió elegida. La nota decía más o menos lo siguiente: "Ada, tus compañeros sanmarquinos esperan que este título no te haga perder la cabeza, procura ser la misma muchacha de siempre, buena y sencilla, que todos hemos conocido". Y entre las cuatro mil y tantas cartas que recibió por aquellos días, ésta fue la que más le impresionó.
Han pasado tantos años y, sin embargo, sigue conservando ese encanto de mujer. Atractiva, con el rostro aún terso y el paso ágil, no tiene a menos confesar que ya ha cumplido 63 años de edad.
Cuenta que estuvo casada durante 30 años y que de esa unión tiene una hija que se llama Pacha. Yo le digo Pachamama, dice con un gracioso mohín. Ella tiene 27 años y estudia asuntos internacionales "con énfasis en la economía del Tercer Mundo".
Ahora tiene como compañero a Willian Hess, con quien ha visitado Iquitos, Nasca, Paracas, Arequipa, el valle del Colca, Cusco y Machu Picchu, a lo largo de más de tres semanas.
¿Cómo ha encontrado Lima? Sorprendentemente, dice, más ordenada. Y en sus viajes lo que más le ha entusiasmado es la belleza natural del país. "Aunque soy arquitecta, me impresiona más la belleza natural que cualquier edificio del mundo".
Actualmente reside en Berkeley, California, donde ella misma construyó su casa. Como arquitecta puede sentirse realizada, pues ha trabajado en la Corporation Bechtel, que es la asociación más grande del mundo en el campo de la arquitectura e ingeniería. Ahí, en un mundo enteramente masculino, recalca Ada, fue chief durante diez años; lo que le dio una experiencia fabulosa. Más tarde fue invitada por la Casa Blanca para formar parte de un grupo de 100 consultores ambientales. Era la única extranjera.
Y así, en momentos que preparábamos este número de las 1,500 ediciones, en que se agolpan tantos recuerdos, llegó Ada Gabriela Bueno, quien en los años cincuenta, con su fresca belleza, de junco y capulí, como diría Vallejo, conquistara Lima. (D.T.L.)